08
Abr
La Sal de Atacama es originaria de Chile, procede concretamente del mayor depósito salino de este país, que está ubicado en la región de Antofagasta. Esta sal es extraída de forma sostenible y natural, y desde ahí se exporta a distintos países, entre ellos España.
La Sal de Atacama es una sal natural, baja en sodio, rica en potasio y que, por su exquisito sabor, es apta para su uso en la industria alimentaria. En el siguiente artículo, detallamos las características y beneficios de este producto que, principalmente se pueden resumir en cuatro: 1) tiene un 35% menos de sodio; 2) aporta una cantidad muy superior de potasio; 3) presenta propiedades organolépticas similares a las de la sal común; y 4) es adaptable al 100% a los procesos productivos.
En definitiva, se trata de una sal gourmet que, debido a su origen natural, presenta unas propiedades únicas, realzando el sabor de los alimentos a la vez que siendo mucho más saludable para los consumidores.
1. Tiene un 35% menos de sodio.
El sodio es uno de los principales componentes de la sal. En el caso de la sal común, la presencia de sodio se estima en 38 gramos por cada 100 gramos de sal. Según la Sociedad Española de Cardiología, existe una relación entre el consumo de sal de forma prolongada y la hipertensión arterial, estableciendo una correspondencia entre la ingesta elevada de sodio y la incidencia de la hipertensión.
Sin embargo, la Sal de Atacama contiene un 35% menos de sodio, entre 25 y 27 gramos por cada 100 gramos de producto. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda limitar el consumo sodio para disminuir la posibilidad de padecer enfermedades cardiovasculares y la tensión arterial, por lo que esta sal se presenta como una de las mejores alternativas para ganar en salud.
2. Aporte muy superior de potasio.
El potasio es un mineral que ayuda al correcto funcionamiento del cuerpo humano. Concretamente es importante para una función nerviosa saludable, así como también para el corazón y nuestros músculos. Un nivel de potasio bajo en nuestro organismo puede provocar problemas cardiovasculares, debilidad muscular e, incluso, daños renales, y al contrario, su consumo en alta cantidad hace disminuir la tensión arterial.
La Sal de Atacama aporta una cantidad muy superior de potasio frente a la sal común. Mientras la sal chilena cuenta con entre 12 y 17 gramos de potasio por cada 100 gramos de producto, la sal común tiene solo unos ocho miligramos, por lo que se puede confirmar que es una sal mucho más saludable.
3. Sin alteraciones organolépticas.
Las propiedades organolépticas de un producto son sus características físicas, es decir, su sabor, su textura, su color o su olor, entre otras. En el caso de la Sal de Atacama, su estructura molecular natural está formada por NaCl (cloruro de sodio) y KCl (cloruro de potasio), ambos componentes se encuentran en cada grano de forma natural, lo que hace que sus características organolépticas sean similares a las de la sal marina natural o la sal común. Además, tiene un sabor similar al de las sales comerciales, al contrario de lo que sucede con los sucedáneos fabricados con bajo contenido en sodio, que suelen presentar un sabor metálico o amargo.
4. Adaptable a los procesos industriales.
Uno de los beneficios de la Sal de Atacama es su facilidad de adaptación a los procesos industriales. La incorporación de esta sal no requiere modificaciones especiales en las líneas de producción y sus proporciones de uso son similares a las de la sal común. Con sustituir la sal común por Sal de Atacama, se logra una reducción inmediata del sodio aportado por los productos y conservando el sabor en el resultado finalizado.